Los viajeros con presupuesto ajustado saben que una de las mejores maneras de sacarle partido a un viaje es alojarse en un albergue: saldrás a descubrir el destino durante el día e intercambiarás anécdotas con otros viajeros en la cocina o el bar por la noche. El tipo de habitación más común en los albergues es el dormitorio compartido con baño también compartido, pero también suelen contar con habitaciones privadas para quienes quieran pagar un poco más.
La atención y disponibilidad de la señora Diana, ofrece desayuno. También la atención del guía que tiene el hostal el señor Ramiro, muy buen tour por los diferentes desiertos, muy buen conocimiento del lugar. Para mejorar de pronto, variedad en el desayuno estuvimos tres noches. Positivo también ubicación en el pueblo cerca al comercio y con parqueadero incluido.
Excelente servicio por parte de la Señora Sandra quien es la host, muy buena relacion calidad/precio, hay para todos los presupuestos. Ofrecen servicios de desayuno, lavado de ropa, si te faltan articulos de aseo personal, ella vende de todo en el hostal e incluso ofrece servicio de peluqueria, uno de los hostales mas completos a donde he ido, volvería sin duda alguna.
puedo recomendar el alojamiento. La ubicación es central y los propietarios son super amables y serviciales. Hay ventiladores en la habitación y enchufes en cada cama. El WiFi funciona bien y, si lo deseas, el albergue también ofrece excursiones económicas al desierto. ¡¡¡Gracias por todo!!!
Es un hostal con lo necesario para que la estancia sea cómoda y agradable, doña Matilde y su esposo hacen que la estadía sea aún mejor, se esmeran por el bienestar de los huéspedes.
La atención del personal. Sin embargo es más un hostal que un hotel. Porque solo incluye la habitación y ya. No jabón, shampoo o toallas. Es bastante simple pero va deacuerdo al precio
Camilo
Pareja joven
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