Los viajeros con presupuesto ajustado saben que una de las mejores maneras de sacarle partido a un viaje es alojarse en un albergue: saldrás a descubrir el destino durante el día e intercambiarás anécdotas con otros viajeros en la cocina o el bar por la noche. El tipo de habitación más común en los albergues es el dormitorio compartido con baño también compartido, pero también suelen contar con habitaciones privadas para quienes quieran pagar un poco más.
El personal del Hostal un 10. Nada mas llegar te ofrecen información sobre la isla, que visitar, las mejores calas, e incluso buscaron información in situ para recomendarnos, según el viento, las mejores.
Por si no fuera suficiente, nos prestaron una sombrilla.
El desayuno está muy bien, es variado y bastante completo.
Habíamos reservado una habitación cuádruple y lo que nos ofrecieron fue un mini apartamento en la planta superior. Mejor imposible.
El hostal es muy kuko, tiene muy buena energía, se nota que las que lo llevan lo llevan con cariño. Limpísimo, agua abundante en las duchas, atención inmejorable y la ubicación muy buena. Recomendable 100%
El trato de Alice y Shira fue más que excepcional. Te sientes como en casa cuando están ellas por el hostal. Te atienden en lo que haga falta y contestan al WhatsApp de la empresa con mucha rapidez. Muy amables, simpáticas y educadas. Hacen un trabajo impecable.
Hemos estado alojados una semana. La estancia ha sido agradable con todo lo necesario para estar a gusto. La nevera en la habitación muy práctica. Tuvimos un problemilla que en cuanto se lo comunicamos a la responsable se puso manos a la obra para solucionarlo. Muy agradable y dispuesta.
La ubicación es buena, a un paseo del centro y existe al lado del hostal un aparcamiento en el que sin problema, todos los días ha estado disponible.
Si lo tuviera que describir en dos palabras, serían Organizado y limpio . La amabilidad de la recepción y facilidad para entrar fue inigualable, tiene todo lo que necesitas y más (sin exageraciones). Impecable, olor agradable desde que entras al hostal. Fueron tan amables que me dejé mi pasaporte y se ofrecieron a enviármelo por correspondencia
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Todo empieza con una reserva
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Luego, un viaje
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