Encuentra posadas en Pirineo aragonés

Con Ben y Corinna te sentirás como en casa, hacen todo lo posible para que la estancia sea agradable y confortable. La casa está reformada y el lugar da muchísima paz. Es ideal para unos días de desconexión en el campo.

Hace unos días estuvimos allí alojados. Desde el minuto uno nos encantó. Fue entrar y sentir el cariño puesto en ese lugar. Cada estancia cada detalle se nota que es un sueño de los dueños hecho realidad... También tuvimos la ocasión de cenar allí y estaba todo riquísimo, comida de muy buena calidad a precio razonable. Innovación y mimo en la cocina con productos de la zona... Muy recomendable el sitio y repetiremos. Está bien rodeado de lugares naturales a los que visitar.

Posada muy limpia y un buen desayuno... amabilidad del personal.. cerca de las pasarelas de Alquezar,..pueblo muy tranquilo. La decoración de la Posada tiene mucho encanto.

FRANKFURT y toda la posada

En general todo, el acceso con código para un check in rápido sin perder tiempo ni esperas innecesarias. Desayuno de cortesía más que correcto, son detalles que hay que valorar.

El alojamiento tiene todo lo necesario para estar relajados, la cama es muy cómoda, el baño tiene todo lo necesario y hay espacio de almacenamiento de sobra. Además está todo decorado de una forma muy bonita y cuidada. Debajo de la propia posada la dueña tiene su restaurante al que se puede acceder para desayunar, comer o cenar. Es cómodo para un pueblo que tiene poca oferta porque es pequeño. La ubicación es excepcional ya que Roda de Isábena es un lugar precioso, tranquilo y acogedor.

Tiene todo lo necesario para una corta o larga estancia: calefacción, aire acondicionado, toallas, sábanas, secador, cafetera, etc. Y todo está muy limpio. La ubicación es excelente. Hay innumerables actividades y excursiones para hacer desde allí.

El alojamiento está decorado con un gusto excepcional. No faltan detalles en las habitaciones y espacios comunes. Ben y Corinna fueron unos geniales anfitriones con un servicio de desayuno impecable y atentos a todos lo detalles! Sin duda, repetiríamos si surge la ocasión.

Nos encanto pasar por Villalangua. La posada es muy linda e Isidoro nos hizo sentir como en casa. La comida que nos preparo riquísima. Sentarnos por la tarde en la terraza y mirar el verde de los campos y los pirineos fue super relajante. Los cuartos muy cómodos y limpios. Nos sentimos como en casa!