Los viajeros con presupuesto ajustado saben que una de las mejores maneras de sacarle partido a un viaje es alojarse en un albergue: saldrás a descubrir el destino durante el día e intercambiarás anécdotas con otros viajeros en la cocina o el bar por la noche. El tipo de habitación más común en los albergues es el dormitorio compartido con baño también compartido, pero también suelen contar con habitaciones privadas para quienes quieran pagar un poco más.
El hostal está gestionado por personas de muchas partes del mundo, es muy interesante y gratificante.
Las vistas de alrededor son increíbles, desayunar con esas vistas fue mi parte favorita del viaje.
Hostel bien ubicado al lado del lago con piscina, mesas y espacios al aire libre, cocina comunitaria, sala de cine, espacio para hacer ejercicio, meditación, yoga, etc., limpio y cómodo. Valoro mucho que en las habitaciones compartidas las camas tengan cortinas para tener más privacidad, luz individual y muchos enchufes. También la habitación era grande, con balcón amplio y aire condicionado perfecto para el calor en verano. En general está bien y mi estancia fue agradable.
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Todo empieza con una reserva
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Luego, un viaje
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Y, finalmente, un comentario
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