Los viajeros con presupuesto ajustado saben que una de las mejores maneras de sacarle partido a un viaje es alojarse en un albergue: saldrás a descubrir el destino durante el día e intercambiarás anécdotas con otros viajeros en la cocina o el bar por la noche. El tipo de habitación más común en los albergues es el dormitorio compartido con baño también compartido, pero también suelen contar con habitaciones privadas para quienes quieran pagar un poco más.
Excelente habitación, camas cómodas, espacio para guardado de objetos personales, baños limpios y dentro de la habitación. Queda cerca de la estación de tren (buenísimo) pero algo alejado del centro de la ciudad. El hostel en sí, recomendado.
Hotel de paso. Las chicas que nos atendieron fueron muy agradables. Cenamos muy bien y bien de precio. El chico de la cocina habla castellano muy bien.
Creo que se acerca más a la idea de un hostel que de un hotel. Se admiten mascotas.
La cama y las almohadas eran cómodas.
Está muy limpio y la decoración es bonita. Para un hostel es estupendo.
de León
Familia con niños pequeños
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