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Bever
El Parel van Bever - Perle de Biévène se encuentra en Bever, a 28 km de Mons, y ofrece salón compartido y wifi gratis. Nice location, excellent facilities and very kind host!
Maldegem
Esta granja de caballos reformada dispone de pastos y establos en una tranquila zona rural, y permite a los huéspedes traer sus propios caballos. I recently had the pleasure of staying at a charming farm hotel, and it was an unforgettable experience. Hosts are very friendly and we felt like home. One of the highlights of our stay was the delightful farmer's breakfast each morning. Freshly baked bread, farm-fresh eggs, and homemade jams were just a few of the delicious offerings. The beautiful horses on the farm added an extra layer of magic to our visit. Watching them graze peacefully in the fields was a calming sight. It was an incredible experience, especially for those who love animals and nature. Overall, staying at this farm hotel was a perfect blend of relaxation, adventure, and warm hospitality. I highly recommend it to anyone looking to escape the hustle and bustle of city life and immerse themselves in the tranquility of the countryside.
Sint-Gillis-Waas
El Vakantiehoeve Berckelaer está situado en Sint-Gillis-Waas y ofrece conexión wifi gratis. Cuenta con bar, jardín y zona de parrilla. Este estadía rural cuenta con sauna. excelente alojamiento en un antiguo almacén de frutas reformado rodeado de campos. nos encantó el apartamento, el entorno y la atención de la anfitriona. a medio camino de las principales atractivos: 50 min de brujas, 35 de Gante, 50 min de Bruselas y 15 de Amberes.
Estadía rural en Maldegem
Popular entre los huéspedes que buscan estadías rurales en Flandes Oriental
Estadía rural en Bever
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Estadía rural en Sint-Gillis-Waas
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Lo que más me gustó es que está en una zona rural muy tránquila en la que puedes aparcar cómodamente además está cerca de Brujas,Bruselas... Me encantó que hubiera granjas cerca para comprar productos locales(muy cerca te venden fresas).La recogida de llaves es muy fácil.
Desayuno excelente, cada día había al menos 10 frutas diferentes, y 8 o 10 tipos distintos de quesos, tanto de la zona como clásicos. Muy bien gestionado. El alojamiento está justo al lado de una zona de bosque con rutas de senderismo, no hace falta ni coger el coche para meterse en plena naturaleza. Es un establecimiento pequeño, por lo que está siempre muy tranquilo.
Nuestra habitación era muy silenciosa, que fue lo que pedí antes de llegar.Las vistas al campo bastante bonitas y eso que la autopista está cerca. Además nos confirmaron vía mail que iban a darnos una habitación de esas características y eso me pareció un buen detalle. Al llegar, la recepcionista fue muy amable. Habitación bastante espaciosa. Poder aparcar sin problema. Hotel de aspecto centro europeo, muy belga.