La Casa Rural Aldekoa se encuentra en Ziga y ofrece habitaciones amplias y modernas con conexión Wi-Fi gratuita y vistas a la campiña navarra que lo rodea.
Casa Rural Kabia está en Arráyoz, en la región de Navarra. Ofrece alojamiento con wifi gratis, parking privado gratis y acceso a la bañera de hidromasaje.
vulkan1974
España
La amabilidad de los dueños, su disposición y cercanía.
El desayuno muy logrado, siempre a punto y lo que cada uno quiere. Encima productos de la tierra y de calidad.
Instalaciones nuevas y muy cuidadas
Casa Rural Iratxeko-Berea se encuentra en Bera, en la región de Navarra, a 19 km de Estación de Hendaya.
Cristina
España
Estancia de lujo en un marcó de ensueño. Enrique y Maitetxu son unos grandes anfitriones con un trato super cercano. Repetiré sin duda. Paisaje de cuento
Casa Rural Borda Lenco se encuentra en Zilbeti, en la región de Navarra, a 33 km de Catedral de Pamplona. Ofrece alojamiento con wifi gratis, zona de barbacoa, jardín y parking privado gratis.
MARTÍ
España
La casa es muy acogedora y el emplazamiento es muy tranquilo para desconectar de las grandes urbes.
Los Alojamientos Acá y Allá se encuentran en Urdániz, a 14 km de Pamplona, y cuenta con piscina exterior de temporada, barbacoa y solárium. Las habitaciones disponen de cafetera y baño compartido.
Ekolanda se encuentra a 34 km de Catedral de Pamplona y ofrece alojamiento consalón de uso común, terraza y cocina compartida. Se ofrece wifi gratis en todo el alojamiento.
MAITETXU HABITACION, que cuenta con jardín, salón de uso común y terraza, ofrece alojamiento en Viscarret-Guerendiáin con wifi gratis y vistas a la ciudad.
Esta es la mejor opción para quien quiera escapar del ruido y del ritmo ajetreado de la ciudad. Las casas rurales son casas privadas situadas en el campo que pueden disponer de instalaciones comunes y con comidas disponibles. Pueden incluir actividades como senderismo, observación de aves o rutas en bicicleta.
Increíble experiencia. Nada más llegar nos dio la bienvenida el gran e icónico Julián, un auténtico ser de luz. La habitación muy acogedora con vistas a la montaña, una noche aquí es un soplo de aire fresco. El desayuno inmejorable, somos de buen comer y nos quedamos satisfechos, productos km 0 y ecológicos. El jardín es de cuento, lleno de flores silvestres y txokos para sentarte y relajarte. En resumen recomiendo esta casa rural si lo que buscáis es paz y tranquilidad🌸🌺
La casa es preciosa y mantiene totalmente la esencia de las casas tradicionales navarras.
Vistas a la montaña que son idílicas.
Ana Belén es una anfitriona de 11, se desvive por sus huéspedes y te facilita todo para que tú estancia sea perfecta.
El alojamiento sorprende por lo bonito y bien cuidado, manteniendo un encantador estilo tradicional.
Las vistas desde la habitación a las montañas son espectaculares.
Un lugar ideal desde el que poder hacer excursiones por el Valle del Baztán, el Pirineo Navarro o Pamplona.
Los bizcochos y yogur caseros riquísimos
El trabajo que hacen Mertxe y Julian es excepcional. La casa es una maravilla, con una decoración llena de detalles. Habitaciones amplias, limpias y bien insonorizadas. El jardín, donde puedes sentarte a descansar después de una jornada de visitas por los alrededores, es un paraiso y la vista se te pierde entre el verde de los campos y los árboles. El desayuno buenísimo, con exquisitas tortillas y dulces caseros. Y las cenas, también super ricas.
Estuvieron muy atentos en todo momento y la casa en sí es una pasada. Las habitaciones son amplias y muy bien decoradas. Los baños también son grandes y está todo nuevo y muy limpio. El entorno es ideal para disfrutar de la tranquilidad y la naturaleza. Y en familia se pasa muy bien porque hay pin pon, futbolín etc.
El trato de Ana Belén inmejorable, siempre dispuesta a ayudar. Muy recomendable desayunar y cenar allí la rica comida casera que te prepara en el momento. Sitio perfecto para desconectar y conectar con la naturaleza.
Es un alojamiento espectacular. El entorno, la tranquilidad, la casa es preciosa muy bien cuidada,tiene detalles en cada esquina que te hacen sentir como en casa. Los anfitriones se preocupan y se ocupan de sus huéspedes, el jardín si pillas buen tiempo como nosotros es súper bonito y apetece tomar algo y escuchar la naturaleza al final del día. Ha sido el mejor alojamiento en nuestra ruta por Navarra.
100% recomendable.
En medio de un pueblo encantador, con una vistas preciosas al valle, está la casa rural Aldekoa, perfectamente arreglada y decorada. Habitación muy amplia y cómoda, perfecta para descansar y relajarse. Amplio jardín. Sitio para dejar el coche. Los dueños son muy majos y nos ayudaron con información para organizarnos por la zona. En definitiva, un lugar perfecto para explorar el valle y descansar en un entorno idílico.
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Todo empieza con una reserva
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Luego, un viaje
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Y, finalmente, un comentario
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