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Ceret pueblecito francés con su encanto personal. Los sábados hacen mercadillo cosa que le da vida al pueblo. Durante el dia con su movimiento de gente, con vida. La noche con escasa luz por las calles y callejuelas hacen que el silencio inunde el pueblo. Los habitantes hablan frances, aunque si ven que no lo dominas te hablan catalan y entienden el castellano. En la fuente de los 9 chorros hay una pequeña zona de bar, restaurantes. Por la calle céntrica del pueblo tienes tiendecitas, super, bares, museo, hoteles...todo en version pequeño y sin perder la esencia de pueblo. Hasta febrero, hay a 10 min en coche, Castillo d'Aubury donde hacen muestra china con luces. Hay una esplanada para aparcar. La muestra, para mi no fue gran cosa ya que he visto de similares gratuitas. Es sencillo moverse por Ceret, si usas gps más cómodo. Lo mejor, andar y " perderse" por el centro y sus callejuelas. Una noche de estancia ideal.

Nos gusto mucho el pueblo, su gente y los paseos largos. El tono de voz de su gente es calmado, muy educado y servicial. Lo recomiendo para pasar un finde y cargar pilas

Ceret es un pueblo que nos encanta, el mercado de los sábados y el museo de arte moderno son geniales Puedes hacer diferentes salidas desde allí.

Es un pueblo muy bonito (solo la parte antigua), comimos en una creperie (Au pied sur le table) recomendable y tambien en una pizzeria (belle pizza). El sábado por la mañana hay mercado. Aprovechamos para ir a Perpignan (en domingo esta todo cerrado incluso restaurantes) y tambien las poblaciones de Castelnou y prats de Motlló (recomendables)

Céret es un pueblo encantador, pequeño que tiene muchísimo encanto y un museu de arte de muy alto nivel. El entorno es muy bonito y en día de mercado debe ser realmente auténtico (sábado)

Precioso sitio con bellos edificios y buenas tiendas y un magnífico museo de Arte. Tranquilidad y muy bellos alrededores