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Amplio, limpio, bien equipado y con aire acondicionado en cada estancia.

La habitación era grandecita, el desayuno muy generoso y con variedad y el lugar genial, "en mitad de la nada". A pesar de estar junto a la carretera no se escuchaba nada, no habia tráfico y cuando pasaba alguno no se notaba.

Un lugar muy tranquilo, perfecto para ir en pareja o en familia.Habitacionuy espaciosa y bonita decoración igual que el aseo.

La ubicación y los dueños del alojamiento muy buenos con nosotros.

Apartamento turístico espectacular!!!! En pleno centro del pueblo, no se puede pedir mejor ubicación, al lado del ayuntamiento y la zona de paseos y bares, con la iglesia de San Pablo al lado, preciosa, hay que verla también.El apartamento es amplio, todo limpísimo, y con una decoración muy acogedora, e Isabel la dueña, es encantadora, nos respondió rápido a todas las dudas de horarios y sitios, siempre muy atenta. Nos dejo el apartamento con todo tipo de detalles que se agradecen muchísimo. Desde pastas tipicas de Oliva " perrunillas" muy buenas,de bienvenida y una botella de agua fría en la nevera , hasta cápsulas de café y café molido riquísimo para la cafetera italiana, infusiones,azúcar, aceite, vinagre, sal. Tostadora, exprimidor de zumo, vajillas suficientes.También productos de limpieza, estropajos y balletas, detergente para lavadora y lavavajillas. Toallas, jabón y champú, secador de pelo. Además el que tenga garaje cerrado " cochera" en el mismo apartamento con acceso directo al apartamento ,es fantástico.El apartamento es fresco y muy amplio, pero aún así había aparatos de aire acondicionado y ventiladores de techo en cada habitación. Desde luego no podemos decir más que cosas buenas pues nuestra experiencia ha sido genial. Mi madre con 75 años que no le gusta salir de su casa, estaba alucinando y encantada con el alojamiento Tenéis que alojaros ahí, os encantará y el pueblo de Oliva de la Frontera también os gustará mucho. Se come genial, unas carnes y embutidos ibéricos de quitar el hipo, el pescado también muy bueno, la gente muy cercana, amable y alegres, con mucha vida. El santuario de la Virgen de Gracia precioso.....

El entorno

El trato, las camas, la limpieza, la ubicación y el desayuno.

La anfitriona Rebeca súper amable y atenta. La casa es grande y muy limpia. Nos encantó la terraza con barbacoa. La ubicación genial, fácil aparcar en la puerta. Es un sitio increíble para desconectar y relajarse.

El patio